Carlos Rubio fue uno de los muchos palmesanos que el pasado viernes se vio sorprendido por la jornada del «Día sin Coche». El joven esta montando una tienda de restauración en la calle Huertos, cerca de la Rambla, y el viernes por la mañana intentó llegar en coche hasta un lugar próximo a esta zona.
Sin embargo, como el tráfico por el centro de la ciudad estaba prohibido, y no podía acercarse a su trabajo en coche, tuvo que reconsiderar su idea. Se le informó que podía dejar el coche aparcado junto al estadio de Son Moix, y allí un taxi lo trasladaría gratuitamente hasta el centro de la ciudad. De esta forma dejó su Renault 4 aparcado en Son Moix y más tarde llegó a su lugar de trabajo, donde permaneció hasta las once de la noche. «Me dirigí al aparcamiento y me di cuenta que esta cerrado, por lo que tuve que dejar allí el coche toda la noche. Por la mañana, a primera hora, volví a recoger el coche y me lo encontré destrozado».
Carlos Rubio explicó que el suyo fue el único coche que pasó toda la noche en el aparcamiento. El vehículo apareció con una ventana destrozada y con graves daños en los intermitentes traseros. «Por cumplir las normas del 'Día sin Coche', y por hacerle un bien a la ciudad, me han destrozado el mío. Esta iniciativa del Ajuntament me obligará a comprarme otro vehículo, porque yo necesito uno para trabajar».
El propietario del Renault 4 se plantea muy seriamente denunciar al Ajuntament de Palma para que se haga cargo de los daños que sufre su coche. «La policía me dijo que no arreglaría nada, pero yo creo que el Ajuntament debería hacerse cargo de la reparación del vehículo, porque no me permitieron entrar en la ciudad y me obligaron a dejarlo aparcado en Son Moix». Carlos Rubio reconoce que esta denuncia contra Cort tiene muy pocas posibilidades de prosperar, pero tampoco entiende que no existiera ningún tipo de vigilancia en el aparcamiento donde tuvo que dejar el coche durante toda la noche.