Una inmigrante nigeriana de 26 años, que se trasladó a Mallorca hace nueve meses para trabajar como limpiadora, ha denunciado ante la Policía Local de Palma que desde su llegada ha sido obligada a ejercer la prostitución por parte de un proxeneta que quería cobrarse con su 'trabajo' el dinero que le había adelantado para el billete de avión.
La víctima se presentó en el cuartel de San Fernando a las cinco de la tarde del pasado sábado y tuvo que ser asistida por una intérprete. Aseguró que desconocía el nombre de la calle en donde residía y explicó que su 'protector', que le había adelantado el dinero para el viaje, nada más encontrarse con ella en Palma le advirtió que no trabajaría como asistenta: «Si no hacer lo que te digo te mataré», le amenazó, al tiempo que le comunicaba que debía prostituirse para saldar la deuda.
La inmigrante, durante meses, siguió las órdenes del proxeneta por temor a represalias, pero de un tiempo a esta parte decidió dejar la calle y exponerse a la reacción del denunciado. Ésta no se hizo esperar y el sábado el individuo la llamó por teléfono y le pidió que fuera a su casa, para saldar cuentas. La nigeriana, temerosa, se presentó en la vivienda y le comunicó que no tenía nada que entregarle porque ya no ejercía la prostitución. Además, le manifestó que no tenía intención alguna de volver al oficio.
La negativa rotunda de la extranjera enfureció al 'chulo', que la obligó a bajar a la calle, en donde la golpeó en repetidas ocasiones. Algunos puñetazos le impactaron en el rostro y la mujer sufrió lesiones de consideración, de las que fue atendida en un centro médico.