El Torrent de Pareis volvió a ser escenario de un aparatoso y complicado rescate. Dos alemanes se perdieron ayer durante una excursión y a pesar del amplio dispositivo de búsqueda pasaron la noche a la interperie. Al final, ya por la mañana, uno de ellos "el que quedaba por auxiliar" logró salir sano y salvo.
Ernest Becker, de 58 años de edad, y su amigo George, de 38, se adentraron en la mañana del miércoles en el torrente y a eso de las once menos veinte de la noche el COS (la emisora de la Guardia Civil) recibió una llamada alertando que uno de ellos, al parecer el primero, había pedido ayuda. El extranjero explicó que su compañero no había conseguido salir y que padecía síntomas agudos de agotamiento y una crisis respiratoria. El dispositivo de emergencia se puso en marcha a las doce y cuarenta y cinco minutos de la madrugada y quedó formado por bomberos de los parques de Inca, Palma, Llucmajor y Sóller, Cruz Roja de aquella localidad, Protección Civil y Benemérita. Un grupo se adentró por Escorca y el otro por sa Calobra, a fin de «peinar» el cauce. La noche era cerrada y el calor y la humedad agobiantes, por lo que las tareas fueron complicadas.
A las 3.25 horas los dos grupos se encontraron y dos horas después Ernest Becker comunicó a los rescatadores que estaba desorientado y que no sabía por dónde continuar para encontrar a su amigo. De este modo, la expedición suspendió la operación hasta las ocho de la mañana, que se reanudó sin novedades. A las 9.30 horas, finalmente, apareció George exhausto y, sobre todo, muy asustado. No había sufrido ninguna lesión grave, pero el intenso calor y la noche a la interperie le habían afectado. Los integrantes del dispositivo de búsqueda informaron que ninguno de los dos excursionistas alemanes portaba la indumentaria adecuada para adentrarse en un paraje de las características del Torrent de Pareis.