Un menor de 15 años se encuentra a disposición de la policía de EEUU como sospechoso del asesinato de otros dos jóvenes de 13 y 14 años, encontrados muertos en el patio del colegio. El nuevo ataque de violencia escolar ocurrió en el barrio de Glendale, en el norte de Los Angeles, y pudo tener lugar a lo largo del pasado fin de semana si bien los cuerpos de los niños asesinados no fueron encontrados hasta el pasado lunes.
A juzgar por las primeras informaciones, las muertes no fueron casuales sino dirigidas contra estos dos niños, uno de ellos hijo de un agente de policía. Sin que se sepan los motivos de este asesinato, la policía ha descartado cualquier motivo racial o relacionado con luchas entre pandillas. Blaine Talmo, de 14 años, y Chris McCulloch, de 13 años, eran amigos y acostumbraban a jugar con el monopatín en el patio de la escuela si bien el lugar en el que aparecieron muertos no era el de su centro escolar.
Ambos fueron encontrados en el patio del colegio Valley View Elementary, cerrado durante el verano, en una posición que hizo creer al vecino que los encontró mientras regaba su jardín que estaban dormidos. Al ver que no respondían, se acercó a los cuerpos para comprobar que estaban muertos en un charco de sangre y apenas reconocibles ante los golpes que habían recibido. La policía está investigando los hechos para llegar a una conclusión y determinar cual fue la causa por la que el menor mató a sus dos compañeros.