El último balance oficial cifró ayer tarde en 55 el número de víctimas mortales del accidente de avión registrado horas antes en la ciudad de Patna, al noreste de la India. El Boeing 737 de la compañía «Alliance Air», subsidiaria de la nacional Indian Airlines (IA), explotó al estrellarse contra una zona residencial a unos dos kilómetros del aeropuerto, mientras el piloto realizaba la maniobra de aterrizaje hacia las 07.40, hora local.
Según los últimos datos de la agencia estatal PTI, 51 personas que viajaban en el avión y cuatro ciudadanos que se encontraban en tierra murieron en el accidente. Siete de las 58 personas que iban a bordo del Boeing 737, incluida la tripulación, compuesta por seis miembros, sobrevivieron y fueron trasladados a la capital india para recibir asistencia médica.
Fuentes oficiales confirmaron que la caja negra del avión fue encontrada, aunque siguen sin conocerse las causas que provocaron la tragedia. Informaciones no confirmadas apuntan como posible causa del siniestro el incendio de uno de los motores del aparato, mientras que el secretario de Aviación Civil, A.H. Jung, dijo que el avión probablemente volaba a una altura inferior a la obligatoria cuando se produjo el accidente. Jung aseguró que el avión se encontraba en «excelentes condiciones» y que no fue detectado ningún problema durante las revisiones rutinarias del aparato, que tenía 20 años. Sin embargo, observadores en la capital india expresaron dudas sobre la condiciones de los aviones fletados por Alliance Air, empresa fundada en 1996, que opera con algunos de los aparatos más antiguos de IA ofreciendo precios más económicos.