El tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia de Palma ha sancionado al acusado, Rafael Vicente Q.T., quien se le considera responsable de haber estafado a 16 clientes. El acusado tendrá que indemnizar a estos perjudicados y les debe abonar, en total, casi cinco millones de pesetas. Al ser insolvente, según se señala en la sentencia, el tribunal declara la responsabilidad civil de la empresa que representaba, a cuyo frente se encuentra otra persona (ex socio del acusado), que nada tiene que ver con estas irregularidades.
Los hechos se remontan a siete años atrás. El acusado estaba al frente de una tienda de muebles de cocina y baño. Según señala la sentencia, realizaba proyectos y presupuestos a los clientes a los que les interesaba montar una cocina en su casa. La sentencia señala que el empresario concertaba el acuerdo con los clientes «con la premeditada idea de incumplir total o parcialmente con las obligaciones de entrega y montaje a que se iba comprometiendo». Así, el acusado, cada vez que concertaba una venta, exigía que el cliente le entregara una cantidad a cuenta por la colocación de la cocina. También le ofrecía al cliente la posibilidad de financiar la operación en pagos mensuales.
Según declara probado el tribunal, el acusado entregaba al cliente algunos muebles de la cocina, pero después incumplía su obligación de terminar el proyecto. Varios de los perjudicados estuvieron varios meses esperando a que el acusado les colocara la cocina hasta que, ante el reiterado incumplimiento, decidieron denunciarle. Algunos se han visto obligados a ir pagando cada mes a la financiera los plazos concertados y, además, han tenido que comprar otra cocina a otro vendedor.