Un joven de 26 años de edad, con antecedentes de toxicología, apareció ayer muerto en una vivienda de Palma, supuestamente a causa del consumo de sustancias estupefacientes.
El cadáver de la víctima se descubrió alrededor de las diez de la mañana de ayer. El joven estaba durmiendo en la vivienda familiar, pero se había encerrado la puerta de su cuarto. Fuentes próximas a la investigación señalaron que los padres se alarmaron al darse cuenta que su hijo no respondía a sus llamadas. Se temía que le hubiera podido ocurrir algo y se optó por entrar en la habitación a través de una ventana. Al tratarse de una planta baja se consideró innecesario solicitar ayuda para entrar, y fue el padre quien decidió penetrar en la habitación a través de la ventana.
Cuando entró con la desagradable sorpresa de que su hijo estaba sobre la cama inconsciente. Se solicitó la presencia de la Policía Local, así como de una ambulancia. Sin embargo, después se comprobó que el joven se encontraba muerto. El suceso fue comunicado al juzgado de guardia. El juez ordenó el levantamiento del cadáver y su traslado al instituto anatómico forense, donde hoy se le realizará la autopsia.