La juez Ana San José, titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Palma, ayer en funciones de guardia, dejó en libertad a los seis turistas británicos que en la madrugada del pasado lunes protagonizaron un altercado público en la calle Punta Ballena, en Magaluf.
Los británicos se presentaron ante el juez bajo la acusación de altercado público, así como de atentado contra agentes de la autoridad, ya que durante la detención dos guardias civiles resultaron lesionados, aunque de poca importancia.
Los detenidos dieron su versión de lo ocurrido y, según parece, casi todos alegaron que aquella noche habían bebido más de la cuenta, si bien ninguno de ellos negó su presencia en el incidente. La magistrado ordenó la puesta en libertad sin fianza, por lo que los turistas británicos pueden regresar a su país.
Los seis detenidos formaban parte de un grupo de hooligans que montó una «batalla campal» en la calle Punta Ballena, sin duda, la más conflictiva de la zona turística de Magaluf, ya que allí se concentran los bares a los que acuden los británicos. Los jóvenes comenzaron a lanzar botellas y otros objetos contra los cristales de los establecimientos y contra otras personas que caminaban por la calle.