La propietaria de una casa de dos pisos de la urbanización palmesana de Secar de la Real no pudo inaugurar la vivienda con peor suerte. En la noche del miércoles invitó a una veintena de familiares y amigos para celebrar al adquisición del inmueble, pero la fiesta tuvo que interrumpirse precipitadamente a causa de un incendio, que causó graves daños materiales.
La celebración, en la calle Abad de la Real número 18, discurrió con normalidad hasta las diez y media de la noche, cuando los invitados que cenaban en el comedor de la planta inferior detectaron humo en el segundo piso. El fuego se originó en un dormitorio de aproximadamente 15 metros cuadrados y las personas que disfrutaban de la celebración reaccionaron con prontitud y cortaron la corriente eléctrica. Luego subieron al dormitorio con dos extintores de coche y trataron de sofocar las llamas.
El denso humo invadió toda la vivienda y cuando Cos de Bombers y policía Local llegaron a la urbanización se encontraron a los invitados en la calle, y a la propietaria con un ataque de nervios. La mujer tuvo que ser atendida por los servicios sanitarios y las tareas de extinción se prolongaron durante una hora. Según las primeras estimaciones, el fuego se inició a pie de cama, que está ubicada muy cerca de una chimenea que distribuye la calefacción por toda la casa. Los indicios apuntan a que durante la cena la estufa del comedor se cargó en exceso, exponiendo a altas temperaturas las colchas de la cama.
El sargento, el cabo y los cinco bomberos que apagaron el siniestro procedieron a ventilar las dos plantas de la casa y antes de la medianoche la propietaria pudo regresar a su interior, aunque se desconoce si pudo dormir allí. El mobiliario de la habitación resultó seriamente afectado y las llamas se propagaron a un baño próximo. El resto de la casa quedó con las paredes ennegrecidas.