Una niña de doce años permanece ingresada en la UCI de la residencia sanitaria de Son Dureta intoxicada por un incendio que se declaró en la madrugada de ayer en su casa de Lloseta. Su madre y otras dos vecinas del edificio siniestrado también resultaron afectadas por el denso humo, pero recibieron el alta médica tras ser atendidas de urgencia.
Àngeles V.R., de 51 años, dormía junto a sus dos hijas en su segundo piso de la calle Son Beltran, número 2, en la periferia de aquella localidad, cuando, sobre las seis y media de la madrugada, se declaró un incendio en la sala de estar. Al parecer las llamas se iniciaron en un brasero y se extendieron con rapidez al mobiliario de la dependencia. El denso humo alcanzó el resto de habitaciones y el pasillo de la segunda planta de aquel edificio, alertando a los vecinos.
Uno de los residentes llamó a la casa de Àngeles V., que ya había advertido las llamas y trataba de sacar de aquel infierno a sus hijas. El hombre tomó en brazos a Cristina G.V., de 12 años, y la bajó hasta la calle. La mujer y su otra hija pudieron llegar a la acera por su propio pie, pero la primera presentaba serias dificultades para respirar y fue evacuada al PAC (Punto de Asistencia Continuada) de Inca junto a la pequeña Cristina. Otras dos vecinas del edificio de dos plantas, que fue evacuado, tuvieron que recibir asistencia médica porque también habían inhalado humo cuando abandonaban precipitadamente sus casas.