Omar Benamar, un norteafricano de 39 años que estaba en prisión acusado de agredir a su mujer, a su suegra y a la cuñada, se escapó ayer aprovechando que fue trasladado desde la cárcel al Hospital General para una consulta médica.
La fuga se produjo el mediodía. Omar Benamar había pasado ya la consulta y fue conducido al furgón por los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía encargados de la custodia. Cuando ya estaba en el vehículo el preso dio una fuerte patada a la puerta, después agredió a uno de los agentes y se dio a la fuga a la carrera. Enseguida se inició su búsqueda pero la misma no dio resultados positivos.
Acto seguido se informó a los responsables del centro penitenciario y al juzgado de guardia. Se dio la circunstancia de que el juez de guardia era ayer Pere Barceló, el mismo que incoa el sumario del caso por el que está acusado el preso fugado.
Como primera medida, el magistrado ordenó vigilancia policial en el domicilio donde residen las mujeres a las que agredió Omar Benamar, para evitar posibles nuevas agresiones. El Cuerpo Nacional de Policía destinó a dos agentes para la vigilancia, mientras que distintas unidades del Cuerpo efectuaban averiguaciones para tratar de localizar al preso fugado.
Los hechos por los que está acusado Omar Benamar ocurrieron el día 24 del pasado mes de febrero en Palma. Según la denuncia, Omar Benamar agredió de manera brutal a su compañera sentimental, a la madre de ésta y a la cuñada. Después les robó la cartera y se dio a la fuga. La compañera del agresor tuvo que ser ingresada en un centro médico debido a las graves lesiones que presentaba.
Esa misma noche una patrulla de la Policía Local localizó a Omar Benamar en el barrio chino de Palma. Pero cuando observó a los agentes el hombre intentó darse a la fuga y se inició una persecución. Finalmente el sospechoso pudo ser detenido, no sin antes ofrecer una tenaz resistencia a los agentes.