El Grupo de Delincuencia Internacional de la policía de Palma detuvo ayer a un británico, llamado Michael Cristopher N, de 49 años de edad, que está acusado de fraude. Sobre este extranjero pesaba una orden internacional de captura dictada por un juez de la Corte de Justicia del Reino Unido. Dicho individuo ya había sido arrestado en Palma el 29 de julio del pasado año, acusado de estar implicado en la comercialización de bebidas alcohólicas (sobre todo cerveza y vino) sin pagar los correspondientes impuestos. El detenido hacía creer que la mercancía que movía la destinaba a la exportación. La policía explicó ayer que el Reino Unido ha estimado en 1.8 millones de libras esterlinas el fraude cometido por el detenido, que al cambio supone más de 370 millones de pesetas.
Las autoridades británicas consideran a Michael Cristopher N., el «cerebro» de la operación fraudulenta para evadir impuesto, si bien contaba con la colaboración de otras personas. En el mes de abril del año pasado trece personas ya fueron juzgadas en Inglaterra por estos hechos. Agentes de la policía británica se han desplazado a la isla de Mallorca para hacerse cargo del detenido, ante la posible extradición del mismo.