Un joven que cubría su rostro bajo un pasamontañas y que además portaba casco de motorista atracó en la madrugada de ayer una gasolinera del polígono de Son Bugadelles, en Santa Ponça. La Guardia Civil está buscando al asaltante, que esgrimió una pistola y roció con 'spray' al empleado.
Las fuentes de las Benemérita consultadas ayer señalaron que el delincuente se apostó en las inmediaciones de la estación de servicio y esperó pacientemente el momento de entrar en el local.
En su interior se encontraba un empleado de 21 años, con la verja de las oficinas cerradas. Sobre las 2'45 horas abrió para recoger los paquetes de prensa que habían llegado y cuando efectuaba el traslado de los bultos fue sorprendido por el atracador, que lo apuntó con una pistola. Iba vestido completamente de negro y se dirigió a él en castellano para exigirle la recaudación.
El trabajador no tuvo tiempo de reaccionar y fue rociado con un 'spray' de defensa en el rostro. El producto lo dejó atontado durante algunos segundos, tiempo que aprovechó el maleante para apoderarse de unas 20.000 pesetas que había en la caja recaudadora. A continuación, sin perder la compostura y en aparente tranquilidad, el joven atracador salió de la gasolinera y se perdió en la oscuridad. El empleado cree que pudo huir a bordo de una motocicleta, pero no consiguió precisar este punto. En cuanto se recuperó dio aviso a la Guardia Civil, que montó un dispositivo de búsqueda por los alrededores de Santa Ponça y las carreteras de entrada y salida de Calvià.