Agentes de la Policía Local fueron testigos en la madrugada de ayer de cómo una conductora se quedaba dormida al volante, en la calle Eusebio Estada, presumiblemente bajo los efectos del alcohol.
Pasadas las dos de la madrugada el 092 fue alertado de que un turismo circulaba por las cercanías de la calle Isaac Peral de forma irregular, haciendo uso constante del claxon. Los funcionarios localizaron el Citroën Saxo matrícula IB-DH dos minutos después de recibirse la llamada y presenciaron cómo se subía a la acera, de forma brusca, y golpeaba el retrovisor izquierdo contra el muro de un garaje. El turismo, pese a todo, continuó su marcha sobre la acera durante unos cinco metros y cuando quedó detenido los policías observaron que la conductora estaba dormida.
Tenía el brazo y la cabeza apoyada sobre la ventanilla izquierda, con la música de la radio a gran volumen. Cuando los funcionarios la zarandearon para despertarla arañó en la muñeca a uno de ellos y comenzó a proferir gritos. Luego pasó a los insultos y amenazas. Los funcionarios notaron indicios de intoxicación etílica y le pidieron que se sometiera a la prueba de alcoholemia. La conductora, de 46 años, se negó a soplar y quedó detenida, mientras que el coche fue estacionado correctamente en la misma calle Eusebio Estada.