Hardoune H., un norteafricano de 40 años de edad, era uno de los principales «cabecillas» del mercado negro de receptación de eurocheques robados en Mallorca y ahora, tras dos meses de investigación, la Guardia Civil ha conseguido detenerlo en el domicilio de Lloret en el que se ocultaba. La Policía Judicial abrió diligencias el pasado mes de junio, al detectar a través de entidades bancarias un elevado aumento en el cobro de eurocheques que habían sido sustraídos. Los delincuentes que los cobraban empleaban documentación falsa y tarjetas de garantías de origen ilícito. La actividad en este terreno, en comparación con años anteriores, era frenética y la Benemérita sospechaba que detrás de estos movimientos se encontraba el jefe de los receptadores, que resultó ser el tal Hardoune.
El primer escollo que encontraron los investigadores fue localizar el domicilio del sospechoso. Se trata de un norteafricano «conocido» por la Guardia Civil, ya que cuenta con amplios antecedentes policiales y durante la temporada estival se traslada a la Isla. Este tipo de maleante esconde celosamente su vivienda, porque es allí donde falsifica los documentos, y por tanto su localización fue complicada.
Sin embargo, recientemente se descubrió que residía en una casa del centro de la Isla, en concreto en la localidad de Lloret, y que sólo acudía al inmueble para descansar. Además, procuraba pasar desapercibido entre sus vecinos, para no levantar la más mínima sospecha. El pasado viernes, a las 9'50 horas, el dispositivo de vigilancia frente al chalet detectó que Hardoune se disponía a subir a su coche de alquiler y fue entonces cuando los agentes se acercaron a él y lo detuvieron.