José Luis M.R., de 25 años de edad, fue interceptado y denunciado por la Guardia Civil del Mar, acusado de poner en peligro la integridad física de los bañistas de la playa de Ciutat Jardí de Palma. También se le han incoado expedientes sancionadores por falta de titulación del conductor, por falta seguro obligatorio y por falta de matriculación de la moto acuática "un delito que se empieza a penar desde mediados del mes de julio".
Los hechos ocurrieron el pasado lunes, alrededor de las ocho
menos veinte de la tarde, en la playa de Ciutat Jardí.
Una llamada al 092, alertando sobre los peligros que podía traer la
conducción temeraria de este joven junto a las bañistas, hizo que
una patrulla acudiera hasta el lugar del suceso, donde el motorista
acuático zigzagueaba entre los bañistas.
Otro agente de la Policía Local, destinado en Torre d'en Pau, se desplazó hasta la playa, donde pudo observar los hechos. El policía pidió otras unidades y que se avisara a la Guardia Civil del Mar. Varias patrullas más acudieron al lugar y, con ayuda del agente de Torre d'en Pau, controlaron los movimientos de la moto con el objetivo de identificar al infractor. Gracias a unos prismáticos se pudo identificar al motorista acuático y se le transmitieron los datos a la Guardia Civil.
Aunque el joven se dio cuenta de la presencia policial, en lugar de salir del agua empezó a realizar desplazamientos desde la playa de Ciutat Jardí hasta la rampa ubicada frente al hospital de San Juan de Dios. El motorista no realizó en momento alguno esfuerzos por acercarse hasta la orilla.