El fiscal solicita penas que suman 32 años de cárcel para tres personas que están acusadas de vender droga en un pub de la calle Joan Miró, cerca de la plaza Gomila. Se trata de Guillermo Ll.M., ex propietario del pub «TBO»; Marcial B.H., camarero del bar y Benito M.C. Para los dos primeros se reclama diez años de prisión, mientras que para el tercera se le pide una condena de doce años.
Los tres acusados fueron detenidos por la policía de Palma en el mes de marzo de 1996. La policía inició la investigación tras producirse una pelea entre un camarero del bar y un cliente que acudió a comprar un gramo de cocaína. Este cliente se quejó de la mala calidad de la droga que le habían vendido, por lo que volvió al local y se enfrentó con la persona que le había vendido esta sustancia.
Esta pelea coincidió con la denuncia que presentó la asociación de vecinos de la barriada, que se quejaba de que en este establecimiento se estaban dedicando al tráfico de drogas. La policía comprobó que la persona que podía dedicarse a la venta era Marcial B.H. Trabajaba como camarero en el pub, y era consumidor habitual de cocaína. La policía sospechó que esta persona se autofinanciaba el consumo vendiendo droga para el dueño del pub para el que trabajaba.
Los investigadores, tras identificar al dueño del pub, pidieron una autorización para intervenir su línea telefónica. Una de las conversaciones más significativa, y que ayer fue escuchada por el tribunal de la Sección Segunda de la Audiencia, es una que mantiene Guillermo Ll.M. con Benito M.C. En ella el primero le pide que le proporcione diez «botellas de butano», refiriéndose supuestamente a diez gramos de cocaína.