La Audiencia de Palma ha fijado una condena de diez meses de prisión para Bernardo Pujol Ginart y su compañera Magdalena Vicen Pujol, ambos de 52 años de edad, que lograron engañar a 14 entidades bancarias distintas y a un prestamista para que les concedieran diferentes créditos, logrando de esta forma recibir 46.5 millones de pesetas. Los dos acusados se declararon culpables en el juicio. Su abogado llegó a un acuerdo con el fiscal y se pactó una condena de diez meses de prisión para cada uno de los acusados, a cambio de que ambos se declararan culpables del delito de estafa.
Según la sentencia, la pareja desde 1985 a 1988 se dedicó a acudir a diferentes entidades bancarias de Palma para solicitar créditos. Para lograr que les prestaran el dinero aparentaban una solvencia económica, que ninguno de los dos tenía. Así, para aparentar esta solvencia, presentaban en los bancos una declaración de bienes, en la que constaba que tenían la explotación de un bar situado en el kiosco de Ferrocarriles de la plaza de España. También afirmaban que eran propietarios de un piso situado en el número 20 de la calle Archiduque Luis Salvador, así como de dos vehículos.