Ayer quedó visto para sentencia el juicio contra los responsables del derrame de ácido nítrico, que se produjo en el aparcamiento de la fábrica de Perlas Majórica en Manacor, y que afectó a 132 personas. La fiscal Mercedes Bujanda retiró la acusación contra dos de los cinco imputados. En concreto exculpó al ex alcalde de Manacor, Gabriel Bosch, empleado de Majórica, y al conductor del camión en el que se cargó el residuo tóxico. Los hechos ocurrieron el día 30 de mayo de 1996. La fábrica había contratado los servicios de una empresa para transportar residuos tóxicos a una planta de Barcelona. La empresa encargada del transporte contrató a su vez los servicios de un camión cisterna para trasladar esta partida de ácido. El camión cuba, antes de viajar a Palma, había realizado un transporte de disolvente y la cisterna no se había limpiado. La descarga del ácido nítrico se realizó en el aparcamiento de la empresa de Manacor. Sin embargo el contacto entre el ácido y el disolvente provocó un gas tóxico, que afectó a casi todas las personas que se encontraban por la zona.
La fiscal pidió un año de cárcel para un empleado de Majórica, para el responsable del transporte y para el director general de la empresa propietaria del camión cuba. La acusación, que imputó un delito de riesgo, consideró que los tres acusados no habían cumplido las normas de seguridad que se precisan en este tipo de transporte de residuos, y que por ello se puso en peligro la integridad física de las personas.