Un incendio que se inició alrededor de las doce del mediodía de ayer calcinó unas 20 hectáreas de terreno de monte en sa Serra de Na Burguesa. Las primeras llamas se localizaron a poca distancia del Golf de Bendinat, en una zona muy transitada, y se fueron extendiendo rápidamente hacia es Coll des Pastors y s'Hostalet. Sobre las causas, no había una respuesta oficial y no se descartaba ninguna hipótesis.
El día anterior, viernes, se desplegaron medios aéreos y humanos en la misma zona al haberse detectado un conato de fuego, que pudo ser sofocado rápidamente. A las ocho de la tarde los trabajos de extinción seguían a buen ritmo y con optimismo, puesto que se estaba a punto de tener el siniestro controlado.
En los trabajos de extinción participaron ayer efectivos de los Bombers de Mallorca de los parques de Calvià y de Llucmajor; el Cos de Bombers de Palma; Protección Civil de Calvià; Policía Local de Calvià; Policía Local de Palma; Guardia Civil; camiones y personal de la empresa Calvià 2000; la Asociación para la Defensa Forestal de Calvià; un helicóptero Halcón; dos aviones Dromadair con base en Son Bonet; un Canadair que se desplazó a la Isla desde la base de Torrejón de Ardoz (Madrid); personal del Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat); personal de la Conselleria de Medi Ambient y soldados del Ejército.
Al lugar del siniestro se desplazó Santiago Sainz de los Terreros, director general de Medi Ambient; Julio Maeso Guerrero, director del área de Seguridad de Calvià, así como mandos policiales y de los bomberos.
Las llamas fueron calcinando una amplia zona que ya había sido devastada por otros incendios ocurridos años atrás. De hecho, pese a que el lugar había sido repoblado, aún mostraba signos del anterior siniestro. El incendio forestal afectó a una amplia zona compuesta por matorral, pinar disperso y áreas de repoblación natural y otras de repoblación artificial.
A las siete de la tarde se tenía controlado el fuego en la parte superior de la montaña, pero los efectivos que actuaron se esforzaban por atacar las llamas que afectaban a la parte inferior del monte, donde todavía no se había controlado el fuego. La mayor concentración de llama se localizó en una zona de difícil acceso para los efectivos terrestres. Por ello fue fundamental la actuación de los medios aéreos para lograr sofocar las llamas, que amenazaban con extenderse con facilidad debido a que el terreno estaba muy seco por la falta de lluvias.
Una «lluvia» de cenizas cayó ayer sobre Palma y Calvià Una intensa «lluvia» de cenizas cayó ayer tarde sobre la superficie de Palma y Calvià. Era una más de las consecuencias de este espectacular incendio forestal, que se inició ayer en uno de los «pulmones» verdes de las dos localidades y que ha supuesto la destrucción de un extenso terreno montañoso. Además de las cenizas, una intensa nube de humo tiñó de rojo el cielo de la montaña, que fue extendiéndose hacia la costa.