La empresa Isma 2000 se constituyó con la puesta en marcha del sistema de reciclaje y compostaje de residuos sólidos, sobre todo de papeles y plásticos. Desde su creación ha sufrido, contando el iniciado ayer, cuatro incendios. El penúltimo, ocurrido en el mes de diciembre de 1997, produjo la destrucción casi completa de las instalaciones. Los daños fueron millonarios, cuantificados en cerca de dos mil millones de pesetas.
La Guardia Civil está investigando ahora el origen de este siniestro. Se está comprobando si la nave, construida con material de aluminio, tenía un sistema contraincendios, ya que en su interior almacena material tan combustible como es el papel. Según parece, la empresa recibió una ayuda económica del Govern balear tras sufrir el penúltimo incendio, que ocasionó perdidas millonarias.
Desde fuentes próximas a la empresa municipal EMAYA se considera que estas fábricas que se dedican al reciclaje de papel deben extremar las medidas de seguridad, sobre todo de sistemas contra los incendios. Desde la empresa municipal se recuerda el esfuerzo que se está realizando para lograr el reciclaje de las basuras.