El almacén de una fábrica de reciclaje de papel quedó ayer completamente destruido como consecuencia de un voraz incendio, cuyo origen está siendo investigado por la Guardia Civil. No se descarta que pueda ser intencionado. La nave, que pertenece a la empresa Isma 2000, situada en el polígono industrial de Marratxí, sufrió importantes daños por la acción de las llamas. Las pérdidas aún no han sido cuantificadas, pero son muy elevadas.
El siniestro se inició poco antes de las dos de la tarde de ayer. El fuego se inició en unas balas de papel almacenadas en el exterior de la nave. Al tratarse de material muy inflamable, las llamas se propagaron con gran rapidez.
Un amplio dispositivo de bomberos, de Palma y del Consell Insular, tuvo que trabajar durante toda la tarde de ayer para poder controlar el fuego, que produjo una intensa nube de humo que se podía detectar desde varios kilómetros de distancia. En la extinción del fuego participaron efectivos de los bomberos de Palma, Calvià, Sóller, Calvià, Llucmajor e Inca.
En la extinción también colaboró la empresa EMAYA, cuya presidenta, Maria Crespo, estuvo presente en el lugar de los hechos. La empresa municipal envió cinco camiones cuba cargados de agua, para facilitar el trabajo de los bomberos, ya que las bocas de suministro estaban situadas a más de medio kilómetros de distancia. También se envió una grua para poder salvar una máquina, de reciente compra, que estaba colocada en el interior del almacén y que corría peligro de quedar destruida.