Un constructor de 47 años de edad, vecino de la localidad de Inca, murió en la tarde de ayer a consecuencia de un accidente laboral que ocurrió en un hotel en construcción de Cala Mesquida, en el término de Capdepera. Además, otro operario resultó herido grave al quedar atrapado bajo una máquina en sa Pobla.
La jornada de ayer fue aciaga en cuanto a la siniestralidad en obras de la Isla. El primer accidente, y el de consecuencias más dramáticas, tuvo lugar a las 14'35 horas, a la entrada de Cala Mesquida. De acuerdo con la información facilitada por la Guardia Civil, Francisco López estaba trabajando en la segunda planta y de improviso se precipitó por el hueco del ascensor, quizás por un vahído o por un tropezón. El constructor cayó desde seis metros de altura y sufrió un tremendo traumatismo torácico. Los sanitarios de Ambulancias Insulares, desplazados con urgencia al lugar, trataron infructuosamente de reanimarlo, pero al final sólo pudieron confirmar su defunción.
El fallecido era una persona muy conocida en Inca y en el mundo de la construcción. El otro siniestro aconteció en el polígono de La Vileta, en sa Pobla, cuando a un trabajador llamado Juan M.A., de 40 años, se le vino encima una máquina pesada. El aparato le aprisionó las piernas y sus compañeros dieron la voz de alarma.