El pirómano que en la mañana del pasado jueves calcinó nueve contenedores de Palma volvió a actuar en la noche de ayer. Otra decena de cubos de basura de las inmediciones del Camp Rodó fueron incendiados sin que ningún turismo estacionado o fachada de edificio resultaran afectados.
Un portavoz del Cos de Bombers de Palma señaló que «casi con toda seguridad» se trata del mismo incendiario del jueves y añadió que «La Policía Local ya ha abierto una investigación» para localizarlo.
La primera alarma se produjo a las 21'45 horas y la última a las 23'00. La decena aproximada de incendios tuvieron el mismo escenario: calles de la zona del Magisterio, Camp Rodó, General Riera y la Carretera de Sóller. Mientras el Cos de Bombers procedía a sofocar los focos del fuego, el Cuerpo Nacional de Policía y la Policía Local dieron una batida por las inmediaciones, pero no se descubrió al sospechoso. Los bomberos creen que el pirómano incendió los contenedores con la ayuda de cerillas, ya que parece improbable que hubiera utilizado gasolina.
Casi todos quedaron destruidos, ya que están construidos en plástico y son altamente inflamables. «El principal riesgo es que el camión de basuras cargue el cubo como hace habitualmente, sin que los operarios detecten que en su interior se está iniciando un fuego. De esta manera se puede provocar un grave siniestro», comentó la fuente consultada. Sobre el perfil del incendiario, el oficial de los bomberos apuntó la posibilidad de que se tratara de jóvenes «que regresan de marcha y quieren acabar la noche haciendo alguna gamberrada», pero tampoco descartó que fuera algún perturbado.