El Ayuntamiento de Madrid no admite la responsabilidad, ni aún política, en el accidente ocurrido en la noche del pasado viernes en el Teatro Calderón, cuando el desprendimiento de un trozo de cornisa causó la muerte de una joven de 18 años y heridas a otros tres.
El concejal madrileño de Protección Civil y Bomberos, Carlos López Collado, dijo que el hecho de poner en conocimiento del Ayuntamiento el mal estado del edificio, como asegura haber hecho el arrendatario del teatro, José Luis Moreno, «no traslada a esta institución la responsabilidad del propietario o de quien lo esté llevando en cada momento».
Tras reconocer que ignoraba los términos exactos de la denuncia formulada contra el Ayuntamiento y qué informes técnicos la avalan, el concejal afirmó que «lo sorprendente, y la pregunta que cabe hacerse, es por qué se seguían dando funciones si el teatro estaba fatal, como se dice».
Mientras en la comisaría de Centro continuaban ayer realizándose las diligencias correspondientes a este caso, que se prolongarán al menos otras 48 horas.