El año que finaliza ha sido exitoso desde el punto de vista de la lucha contra el tráfico de estupefacientes. El GIFA (Grupo de Investigación Fiscal y Antidroga) de Balears se ha incautado en este período de más de 4.000 kilos de hachís, 7.000 gramos de cocaína, y 20.000 pastillas de «éxtasis» y otras sustancias.
En la estadística facilitada ayer por la 313 Comandancia de la Benemérita se informa también que un total de 70 personas fueron arrestadas por su supuesta implicación con actividades relacionadas con el narcotráfico, muchos de los cuales acabaron entre rejas.
Además de la intervención de drogas y el arresto de sospechosos, los funcionarios del GIFA (integrados en la unidad EDOA) precintaron numerosos vehículos de lujo, teléfonos móviles, documentos bancarios y otros efectos que se hallaban en poder de los «narcos».
Las fuentes consultadas destacaron, de entre todos los servicios del año, la desarticulación de una red internacional de tráfico de hachís en Menorca, lo que supuso la intervención de un alijo de 2.600 kilos de hachís, tres yates y varios vehículos.
Las investigaciones que se han realizado durante todo el año en la Guardia Civil tuvieron un especial éxito en el mes de octubre. El día 26 se detuvo a dos personas y se intervinieron 50 kilos de hachís y un camión valorado en cuatro millones. Cinco días después se arrestó a un supuesto traficante, a quien le encontraron 850 gramos de cocaína y 625 mil pesetas en efectivo.