Dos alumnas de la escuela de diseño textil «Genny», de Igualada, fallecieron y otras diez resultaron heridas, una de ellas muy grave, al hundirse el edificio de la antigua fábrica textil Pola que había sido reconvertida en academia de confección.
El accidente se produjo aproximadamente a las 09:10 horas cuando falló uno de los pilares que sujetaba una cruceta de vigas e hizo caer el edificio de tres plantas, situado en el número 24 de la calle Tarragona, y que todavía no tenía permiso para impartir clases.
Doce alumnas de entre 15 y 23 años que estaban esperando en el aula el inicio de la clase quedaron atrapadas bajo los escombros. El edificio había sido sometido durante las últimas semanas a una profunda remodelación, aunque las obras, que contaban con todos los permisos municipales en regla, aún continuaban en la parte baja del edificio, donde al parecer se originó el hundimiento.
El conseller de Gobernación de la Generalitat, Xavier Pomés, que se desplazó a Igualada para coordinar las tareas de rescate, dijo que la causa más probable del hundimiento fue «el fallo de un pilar que sustentaba una de las crucetas del edificio».
El conseller de Enseñanza, Francesc Xavier Hernández, confirmó que la escuela aún no había recibido el permiso para iniciar las clases en sus nuevas instalaciones y que únicamente podía impartir enseñanza en sus antiguas dependencias, situadas en el número 24 de la misma calle.