Las relaciones de Turquía con la Unión Europea en general, y con la alianza atlántica en los últimos meses están siendo muy complejas. Mientras Europa se ‘bate' con Putin precipitando la protección de sus fronteras del este, Erdogan está jugando en otros tableros. Por eso se dice que el ajedrez es el deporte que más se parece a la política internacional.
Elecciones en Turquía: Las próximas elecciones presidenciales se consideran cruciales e incluso marcarán un punto de inflexión fundamental en el país. Su simbolismo se ve reforzado por el centenario de la fundación de la República, se produce después de la transición al sistema presidencial con las elecciones de 2018, y con casi dos décadas de gobierno continuo del Partido de la Justicia y el Desarrollo. La crisis política y económica que arrastra el país en los últimos años, la crisis de refugiados y la guerra en Siria ha profundizado la polarización del país. Todo esto hace que las elecciones del 18 de junio del año que viene sean trascendentales para el país y para su presidente.
Por eso todos los movimientos en el exterior, forman parte de la campaña electoral interna.
Conflicto con Grecia: El viernes pasado, el Ministerio de Relaciones Exteriores griego informó a Turquía de su protesta formal después de una «violación sin precedentes de la soberanía griega por parte de dos aviones de combate turcos», dos aviones turcos que se habían acercado al puerto de Alexandroupolis. La disputa sobre las islas del Egeo es solo una de las viejas diferencias recientes entre Turquía y Grecia, que también incluyen la disputa sobre las reservas de gas natural en el Mediterráneo, la cuestión migratoria y la isla de Chipre. El momento elegido por Ankara para mover la cuerda griega no es casual. Cinco siglos después, el sueño de gobernar el mar Mediterráneo oriental sigue latente.
Invasión siria: con la excusa de ‘limpiar de terroristas' a Siria, Turquía se prepara para una cuarta intervención militar en el norte de Alepo, Manbech y Tel Rifaat. Esta intervención al parecer tiene luz verde de Putin, y solo necesita de la bendición de la OTAN. La crisis ucraniana ha puesto toda la atención mundial en Kieve. Ni a EEUU ni a Rusia les interesa un frente abierto en oriente medio. Con Bashar en sus horas bajas, las milicias kurdas YPG atrapadas, es el momento de Erdogan para apuntarse la victoria en su particular guerra contra el terrorismo.
A partir del segundo turno en el tablero de ajedrez, hay la posibilidad de cuatrocientas posiciones, hay más de 190.000 partidas posibles y después de tres movimientos hay millones de jugadas posibles. Tal vez por eso, el ajedrez es el deporte más parecido a la geopolítica; aunque viendo el silencio de China ante estos movimientos, casi convendría aprender a jugar al Xiangqi.