La mujer en el mundo tenía un trabajo marcado, una razón de ser con un único propósito: casarse, tener hijos, cuidar de todos; trabajar en casa, esperar la llegada del marido, salir a pasear cogidos del brazo, tomar una chufa. Regresan a casa para cenar, los niños ya cenaron, leen un tebeo y a la cama. El matrimonio toma un piscolabis y se retira pues ambos se levantan pronto. Es una monotonía insoportable sin permitirle a su mujer tener alguna afición, como ir a gimnasia, pintar, esculpir, escribir... Ella tan solo sale con el marido.
Pero en 1987 en Washington DC se inauguró el primer National Museum of Women in the Arts. El museo recibió muchos mecenas que sostuvieron el recinto mediante donaciones, alcanzando el tercer rango de visitantes de la ciudad. Las mujeres se alegraron de poder mostrar obras realizadas por mujeres. Pues se creía que las mujeres eran incapaces de poseer genio, pero llegaron a competir con sus maridos, creyendo que pintar no era trabajo para ellas. Eran ineptas para pintar, esculpir, etc.
En el año 1893 se celebró la Exposición Mundial de Columbia, donde se instaló el pabellón de las féminas, que fue de los más visitados y elogiados por la idea y las obras. Las directoras pidieron un edificio permanente para las obras femeninas de cualquier época. Tardaron años en abrir su museo.
Las primeras artistas eran habitualmente hijas o parientes de pintores, en cuyos estudios trabajaban, como en el caso de Lavinia Fontana (1552-1614). Otra creadora y pintora internacional fue Sofonisba Anguisola (1535-1625), que fue considera la primera mujer del Renacimiento y fue pintora de corte de Felipe II. Ambas eran perfectas en la representación de los ropajes y los colores vivos, con joyas minuciosamente trabajadas.
En el siglo XVII, la pintura holandesa y flamenca tuvo pintoras de naturalezas muertas, paisajes, puentes, animales, personajes y vistas alejadas pero reales. El siglo XVIII fue la era de las escritoras francesas como Mme. De Lafayette, De Staël... Eran anfitrionas de veladas, pero no pudieron ir a la Escuela de Bellas Artes. Tiempo después, las mujeres se liberaron y aumentaron las artistas.