Puesto que el Barça femenino, a diferencia del masculino que da verdadera pena, lo está ganando todo incluida la Champions y todas las alegrías que tendrán los culés en mucho tiempo parece que serán cosa de chicas, comprenderán que aunque con retraso no teníamos más remedio que elogiar aquí a su capitana, la centrocampista atacante Alexia Putellas.
Que es la que piensa, ordena, lleva la manija, roba pelotas y marca el ritmo del partido. Un cerebro, al que le caben las cuatro esquinas del campo, la línea imaginaria del fuera de juego, las dos áreas, el pase al hueco cuando no hay hueco y hasta la portería contraria, pues igual mete goles en sus ratos libres.
Un cerebro futbolístico, como el de Sócrates, pero no el Sócrates filósofo, que también, sino el doctor Sócrates centrocampista de la selección brasileña. Lo que el Barça varonil no ha podido encontrar tras gastarse cientos de millones en tuercebotas. Por supuesto, Alexia es todo un emblema de la Masía, aunque de la Masía femenina, donde llegó a los 12 años y como tal protagonizó la goleada histórica al Chelsea en la final de Champions en Gotemburgo.
Que a punto estuvo de no poder jugar, pero jugó como los ángeles y un vistoso vendaje en el muslo izquierdo. En ese Barça triunfante, el que sí es más que un equipo, hay otras jugadoras excelentes, como la goleadora Jennifer Hermoso, pero hemos preferido destacar a Putellas por ser la capitana, ser más simbólica y, desde luego, ser mucho más catalana. 27 años tiene la criatura. Hace tiempo que el deporte español se sostiene y hasta saca pecho por las chicas (los tíos miran) y el Barça, desde luego, también. Hubo titulares diciendo que es el primer club que gana la Champions en ambos géneros. Muy astuto, ese dato. Mira que si el fútbol lo tienen que salvar las mujeres.