C0incidiendo con la temporada baja con más oferta de las aerolíneas en la historia de las Islas, la Confederación de Asociaciones Empresariales afirma que la economía balear «está dando señales de agotamiento» y advierte que su modelo de crecimiento «está comenzando a tocar techo». También señala que se desmarca de «la tendencia general a la aceleración observada en buena parte de los países de su entorno competitivo». Alude a la nueva etapa de relajación monetaria, la fortaleza del mercado laboral y la progresiva moderación de la inflación. CAEB apunta, en su informe de evolución económica del segundo trimestre de 2024, los indicadores que confirman la desaceleración en los distintos sectores, con la industria que sigue como la actividad con menos dinamismo. En cambio, el consumo privado, la inversión y la demanda externa registraron un buen crecimiento. Llama la atención que la principal conclusión consista en que «durante el verano Balears ha seguido reduciendo empuje a pesar de una temporada turística de récord en afluencia de visitantes».
«Dificultades estructurales».
¿Y cuáles son las razones que provocan esta desaceleración de la economía balear? Los empresarios apuntan al «problema interno» del Archipiélago, en referencia a «las dificultades estructurales para aprovechar los esfuerzos de acumulación y los volúmenes de actividad». Hay que explicar estas dificultades: caída de la competitividad, sobrecostes de insularidad no compensados y pérdida del poder de compra cuando en los últimos cinco años la inflación ha sido superior a los aumentos salariales.
Un modelo cuestionado.
El análisis de CAEB invita a la reflexión y al debate para profundizar en el origen, impacto y debilidades de estas dificultades estructurales que lastran la economía balear. El actual modelo, que está siendo cuestionado, está tocando techo. Es el momento de adoptar decisiones.