El Colegio de Aparejadores de Baleares ha alertado de un intento de fraude masivo con las inspecciones técnicas de edificios (ITE), mediante un buzoneo masivo en fincas de Mallorca. En realidad, se trata de un engaño porque suplantan comunicaciones de las administraciones para darle más credibilidad al timo. La segunda fase consiste en que las comunidades de vecinos se ven forzadas a realizar reformas y obras que, en realidad, no eran necesarias y que corren a cargo de las empresas que han suplantado a los ayuntamientos. De esta forma, hay un enriquecimiento ilícito, además de un fraude demostrable. Estas obras innecesarias, además, pueden conllevar cuantiosos gastos para los propietarios del edificio, que son advertidos de que si no pasan la inspección, se enfrentan a importantes sanciones económicas. Es en Inca donde se han detectado los primeros casos de esta nueva argucia, pero hay constancia de que se ha llevado a cabo en otros municipios de la Isla, incluido Palma.
Más vigilancia
Llegados a este punto, pues, sería deseable que las administraciones públicas fueran muy claras con cada comunidad vecinal a la hora de informar sobre los períodos en los que se debe pasar la ITE, llamada ahora Informe de Evaluación del Edificio (IEE). Cuanto más transparencia exista en este sentido, más fácil será para los propietarios no caer en estafas.
Precauciones
Además, los dueños de pisos tienen mecanismos para intentar confirmar que los avisos que han recibido en sus buzones –bien sean físicos o a través de correos electrónicos– son auténticos. Lo más importante es contactar con el ayuntamiento de cada municipio para confirmar la información recibida y también contrastar que los profesionales que se ofrecen a realizar las obras o reformas tienen la titulación necesaria para estos cometidos.