El Parlament debatirá y votará esta semana el proyecto de ley de presupuestos generales de Balears para 2023 en un pleno que se prolongará durante tres sesiones, ya que empezará el martes a las 9.00 horas y concluirá en la tarde del jueves. Las cuentas de la Comunidad Autónoma del próximo año, marcado por la convocatoria electoral del 28 de mayo, ascienden a 7.133,4 millones de euros, la cifra más alta en la historia de la autonomía balear. Serán 735,6 millones más que este año con un aumento que se explica por el incremento de la aportación del Estado, aunque aún no se haya afrontado ni resuelto el nuevo modelo de financiación autonómica; y también por la inyección de fondos europeos, que están llegando mayoritariamente al sector público y que son gestionados por las administraciones.
La ejecución presupuestaria, clave.
Desde el Grupo Parlamentario Socialista, Sílvia Cano subraya la aprobación «en tiempo y forma» de los octavos presupuestos de las dos legislaturas del Govern Armengol como prueba de estabilidad y destaca el «mayor escudo social para familias, empresas y trabajadores y más recursos que nunca en Educación y Sanidad». Y desde la oposición, Antoni Costa insiste en la necesidad de incluir y aplicar una bajada de impuestos y denuncia el bajo porcentaje de ejecución presupuestaria por los incumplimientos en la gestión del Govern del Pacte.
Garantizar servicios públicos de calidad.
De los 7.133,4 millones que gestionará el Govern el próximo año, cerca de mil millones se destinarán a inversión pública. Estas cantidades han de garantizar unos servicios públicos de calidad, ágiles y eficientes, para los ciudadanos de las Islas y, al mismo tiempo, favorecer la reactivación económica y la cohesión social de Balears. Seguimos siendo una comunidad mal financiada y el crecimiento demográfico que han protagonizado las Islas demanda más recursos, que no han de proceder de las familias y las empresas del Archipiélago.