En octubre pasado Jorge Marichal, presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos, declaró, en referencia al retraso que han acumulado los viajes del Imserso durante esta temporada 2021-2022 que «hemos tenido la licitación, pero no sabemos cuándo van a empezar» y añadió que «las condiciones impuestas por el Gobierno nos obligan a decidir a los hoteleros españoles entre susto y muerte». El programa de vacaciones gestionado por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales, que depende del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, cancelado desde marzo de 2020 por la pandemia, que tenía que empezar en octubre, no arrancó hasta febrero en Balears. Pero hubo destinos, como la Costa Dorada, que optaron por no firmar los contratos porque los retrasos acumulados y los precios que paga el Imserso no compensan la apertura, porque el tardío inicio de estos viajes pone en riesgo dos objetivos básicos del programa: el mantenimiento del empleo y el alargamiento de la temporada. Los viajes del Imserso ya no hacen de puente ente dos temporadas turísticas.
Inasumible para los hoteleros.
La presidenta de la Federación Hotelera de Mallorca, Maria Frontera, ha asegurado recientemente que «tal y como está planteado hoy el programa del Imserso es completamente inasumible». Añade que el Imserso exige a los hoteles que, por 20 euros la noche más IVA, ofrezcan alojamiento, desayuno, almuerzo, cena, agua, vino en las comidas, animación y servicio médico. Ello provoca que los empresarios deban sostener estos viajes a base de pérdidas en sus cuentas de resultados.
Recurso ante la Audiencia Nacional.
Aún no ha resuelto la Audiencia Nacional el recurso que presentó Cehat contra las condiciones del programa del Imserso. Se impone el acuerdo con el sector, lo que implica revisar estas condiciones con las empresas de alojamiento y garantizar los viajes para el periodo 2022-2023.