"Yo tengo una pregunta muy seria: si tú vienes de una buena familia, que te dan tu paga, te compran tus cosas... ¿Por qué dejas el instituto? ¿Por qué te gastas ese dinero que te dan tus padres en porros, en fiestas...?". Esta es la reflexión con la que se hizo viral David, más conocido como Nano Jr., quien, con tan solo 22 años, admitía, orgulloso, que tenía dos trabajos para poder sacar adelante a su familia.
Tras conocerse su historia, ha pasado por varias cadenas de televisión en las que ha confesado haber tenido una dura vida protagonizada por la pobreza, el abandono de su padre o el maltrato por parte de una expareja de su madre. Las reacciones no se hicieron esperan y muchas personas le ofrecieron ayuda, incluso un empresario le regaló un coche para que pudiera desplazarse entre sus dos trabajos, aunque en un primer momento no pudo hacer uso de él, ya que perdía mucho aceite. Sin embargo, un mes después de sus primeras palabras, su vida ha cambiado considerablemente.
"Ahora es otro rollo, estoy muy contento. Te sientes bien contigo mismo porque has ayudado", comenta el propio Nano Jr. a 20minutos al ser preguntado por su situación actual tras convertirse en personaje público. El joven, residente en Toledo, está viviendo una realidad que hasta ahora le parecía utópica: "Me piden fotos por la calle".
A pesar de esto, confirma que tampoco es oro todo lo que reluce, pues al igual que recibe elogios, también ha sido objeto de críticas, "mucho hate (odio en inglés), incluso amenazas": "Me han mandado mensajes como 'ten cuidado, sé donde vives', o 'no te van a volver a sacar más en la tele".
Tras su boom, muchas tiendas de moda han contactado con él para promocionar "ropa o zapatillas", incluso algunas empresas le han llamado para hacerle "tatuajes gratis". A pesar este interés comercial, afirma que se ha visto obligado a declinar muchas de estas ofertas "por temor": "Me da miedo la reacción de la gente, que me digan que me quiero aprovechar o que si hago un papel".
Estas críticas es algo que, tanto él como su familia, están llevando muy mal: "Nos dicen que pasemos, que no leamos, pero la gente se pone a comentar y no sabe lo que puede llegar a afectar un comentario". "Provoca rabia", confiesa, aunque sentencia, convencido, que él no está "haciendo nada malo" para recibir este tipo de comentarios.
Para evitar estas situaciones, detalla que "el mundo iría mejor si la gente pasara de las cosas que no le gustan", para centrarse en las que sí: "Si no te gusta mi vídeo, pasa. Si te gusta otro, puedes comentar algo bueno... Por la calle hay mucho odio y se dicen muchas cosas".
Después de todo lo vivido en las últimas semanas, Nano Jr. aclara que ha aprendido que "hay muchísima gente buena": "He recibido muchos mensajes de apoyo de gente que me quiere ayudar", detalla, aunque también se siente mal porque "hay muchos otros chavales a los que no se está ayudando", sentencia.
"No iba a poder compaginarlo todo"
Laboralmente, su situación también ha cambiado. Antes de ser conocido, David se encontraba en situación de pluriempleo. Trabajaba por las mañanas en Amazon, como repartidor, y por la tarde-noche en el restaurante Vips. Su objetivo era claro, sacar adelante a su familia, "lo más importante y lo más bonito que hay" en la vida, afirma.
Hace apenas dos semanas, sin embargo, Nano Jr. decidió "firmar la baja voluntaria" en la empresa de paquetería para poder estudiar. En Vips le ofrecieron pagarle "un máster de hostelería", lo que le llevó a renunciar a su empleo como repartidor, pues dada la oportunidad para formarse, asegura, "no iba a poder compaginarlo todo".
Tras de tomar esta decisión, ahora desempeña un contrato de 15 horas semanales en la compañía de restauración, explica, lo que le permite dedicarle tiempo a su formación, a la par que ofrece algunas charlas o realiza algunos actos que le "van saliendo por redes sociales".
De cara al futuro le gustaría poder "dar charlas en algún instituto" o formarse como coach, pues durante este tiempo se ha dado cuenta de que puede "llegar a la gente". No obstante, decidirá su porvenir "poco a poco", pues también le gustaría hacer algunas otras cosas con las que soñaba de pequeño.
"Siempre he querido opositar para llegar a ser bombero. Muchas veces me lo he planteado, pero nunca lo he intentado", detalla, y deja claro que también tratará de mejorar como persona: "Quiero invertir en mí mismo, mejorar, tener más experiencia y encontrar un buen trabajo con el máster", concluye. No obstante, recalca que tomará "con cabeza" todas las decisiones sobre su futuro.