Facebook intentó obtener ventaja competitiva frente a Snapchat mediante el acceso al tráfico de los usuarios que usaban esta aplicación, en un proyecto secreto denominado 'Cazafantasmas', según se recoge en nuevos documentos judiciales.
La actual Meta utilizó el servicio propio de red privada virtual (VPN) Onavo en 2016 -adquirida tres años antes- para acceder a la información cifrada y al tráfico de los usuarios en sus servidores sobre las búsquedas que hacían sobre Snapchat.
Esta información no es del todo nueva, ya que The Wall Street Journal reveló en 2017 que Facebook usaba la VPN para hacer análisis de mercado, algo que la compañía tecnológica defendió entonces e incluso señaló que ya se advertía en las políticas de Onavo.
La aplicación cerró en 2019, y un año después Sarah Grabert y Maximilian Klein presentaron una denuncia colectiva contra Facebook al entender que con dicha práctica había explotado los datos de los usuarios mediante prácticas engañosas e incurrido en un comportamiento anticompetitivo.
Como parte del juicio que se está celebrando en el Tribunal Federal de California (Estados Unidos), el juez ha hecho públicos nuevos documentos, en los que se revela que Meta/Facebook trató de obtener ventaja competitiva de rivales mediante el análisis del tráfico de los usuarios cuando interactuaban con esas otras aplicaciones, como recogen en TechCrunch.
Para acceder y analizar este tráfico, que estaba encriptado, la compañía recurrido a lo que denominó 'Proyecto Cazafantasmas', en referencia al logo de Snapchat (un fantama blanco sobre un fondo amarillo), como se recoge en los correos internos desvelados en dichos documentos. Básicamente era usar Onavo para espiar a los usuarios de esta VPN con una técnica conocida como 'man in the middle' (hombre en el medio).
Según se desprende del documento, este proyecto se implementó entre 2016 y 2019, primero para obtener información sobre Snapchat pero más tarde también sobre YouTube y Amazon.