Difamación y extorsión y suplantación de la identidad a través de WhatsApp podrían ir de la mano. En las últimas horas se ha alertado de la proliferación de dos tipos de fraude electrónico que tienen por objeto la conocida aplicación de mensajería móvil de Facebook y que según los expertos en ciberseguridad podrían tener alguna clase de relación entre sí.
Según informa la Oficina de Seguridad del Internauta (OSI) en el primero de los dos casos la víctima es extorsionada y difamada a través de sus contactos de WhatsApp tras solicitar un préstamo por medio de una aplicación.
La existencia de un supuesto impago es el quid de la cuestión, y la supuesta razón por la cual empiezan a llegar mensajes difamatorios a sus contactos.
En el segundo caso, los ciberdelincuentes suplantan la identidad de la víctima y solicitan a sus contactos de WhatsApp una cuantía de dinero.
En concreto el ciberdelincuente crea un perfil falso con el nombre y la foto de la víctima, a través de un número internacional.
Cómo actuar
La OSI, dependiente del Instituto de Ciberseguridad (INCIBE), recomienda que bajo ningún concepto se realicen pagos o transferencias de dinero. Si se ha instalado alguna aplicación y se ha solicitado un préstamo a través de ella, lo importante es eliminarla e intenta contactar con el servicio a través de un canal oficial, normalmente los contactos están recogidos en su página web.
Además es recomendable escanear el dispositivo con un antivirus actualizado para descartar cualquier tipo de infección por malware.
En el caso de que haber accedido al chantaje y realizar el pago, bien en moneda corriente o bien en bitcoins, debemos recopilar todas las evidencias a nuestro alcance (capturas de pantalla, e-mails, mensajes, etc.) y contactar con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) para presentar una denuncia.