El incremento de los gastos en los hogares, sobre todo en vivienda y alimentos, ha disparado el coste de criar a un hijo hasta los 758 euros al mes, un 13 % más que hace dos años cuando eran 654 euros, según el informe 'El Coste de la Crianza en España 2024' lanzado este martes por Save the Children.
Una de cada dos familias con hijos deben destinar más de la mitad de su renta a gastos relacionados con la vivienda, la educación, los alimentos, la salud o el ocio, entre otros, mientras aumenta un 70 % el riesgo de pobreza en los hogares con menores. Cataluña es la comunidad más cara para la crianza, con un coste medio de 938 euros mensuales; la más barata, Andalucía con 722 euros al mes. Las demás comunidades autónomas analizadas también presentan costes mensuales mayores a la media nacional: Comunitat Valenciana, 839 euros, Euskadi, 866 euros, y Comunidad de Madrid, 896.
«Criar es caro, lo que influye en la decisión de tener un hijo» en España, donde nacen 1,16 hijos por mujer, la tasa más baja de toda Europa, remarca este estudio, que calcula el gasto que deben enfrentar las familias en las distintas etapas de la vida de sus hijos. El análisis recuerda que el 20 % de las mujeres mayores de 40 años con hijos o hijas habrían querido tener más, y de las que no han sido madres, casi la mitad lo hubieran deseado, según la Encuesta de Fecundidad, Familia e Infancia publicada en septiembre de 2024 por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
La vivienda, gasto clave
El cálculo del coste de la crianza realizado por la entidad de defensa de la infancia ha evolucionado desde los 587 en 2018 (antes de la pandemia) y 672 euros en 2022, a 758 en 2024. Las familias con niños afrontan una inflación específica superior a la media, que se denomina «inflación de la crianza», situada entre 37 % y el 51 %.
Pero los hogares con menores han sufrido principalmente el impacto de la subida de los gastos de alimentación (el 26 % en dos años) y de la vivienda y sus suministros (el 63 % desde 2022), que suponen cuatro de cada diez euros. Save the Children señala que el 43 % de los niños y niñas viven en hogares con serias dificultades para afrontar gastos imprevistos, un aumento de 4 puntos porcentuales respecto a 2022.
«La crianza representa una carga económica considerable para las familias, especialmente en la adolescencia, y se ha convertido en un factor de riesgo significativo de pobreza», asegura Andrés Conde, director general de la entidad.
El coste por edades
Los gastos varían según las edades de los menores. Hasta los 3 años, es de 609 euros, copado principalmente por los gastos de conciliación -como escuelas infantiles-, vivienda -adaptar espacios-y alimentación. De los 4 a los 6 años sube a los 692 euros, de los 13 a los 17 el coste mensual es de 807 euros, y alcanza la cifra máxima, de 7 a los 12 años, con 812 euros.
Las etapas cercanas a la adolescencia y hasta la mayoría de edad acumulan los mayores gastos por cambios en habitaciones o la compra superior de alimentos, pese a que se deja de comprar juguetes, aunque no dispositivos tecnológicos.
«El pescado fresco es muy caro para comprarlo con frecuencia»
La cifra de pobreza para hogares monomarentales es especialmente preocupante: la mitad de los 530.000 hogares de este tipo están en riesgo de pobreza. Como el que forman Inma y su hijo de 12 años: «Compramos menos cosas cada vez. Pescado pocas veces porque normalmente terminamos yendo a coger la misma bolsa de congelados. El fresco es demasiado caro para estar comprándolo con una frecuencia más o menos normal».
El de Inma es uno de los testimonios reales que ponen rostro a las cifras del estudio. Su hijo va a un instituto con aulas TEA (Trastorno del Espectro Autista): «No le puedo pagar terapias, se las hago yo en casa, pero le hago lo que puedo como madre, porque como no soy su terapeuta no lo puedo tratar», cuenta.