Un día al año los casi 25 payasos de la Sonrisa Médica logran escapar de los hospitales de las tres principales islas de Balears. Los doctores de la nariz roja acostumbran a dejar con la boca abierta a sus amigos los niños y les colorean el corazón en los días grises de camillas incómodas y agujas antipáticas. Únicamente en la Festa de Nassos abandonan los botiquines mágicos y los pasillos interminables para mezclarse con el común de los mortales.
El recinto ferial Es Molí de Santa Ponça acoge desde 2016 una jornada festiva que este domingo cumplió una década de vida persigue un doble objetivo: por un lado, ofrecer un sinfín de actividades a los más pequeños de la casa y, por otro, dar a conocer la impagable labor que lleva a cabo desde hace 30 años la principal organización de payasos de hospital de las Islas.
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La jornada fue un éxito absoluto al congregar a cerca de un millar de asistentes que pudieron disfrutar de actividades como actuaciones musicales, un mago, talleres de inglés o robótica, un conjunto de juegos de patio de colegio ‘de antes’ como la comba o el piso, así un castillo hinchable y varias motos eléctricas que se han convertido ya en marca de la casa. Por su parte, Ultima Hora aportó un taller de reciclaje de papel en el que se utilizaron ejemplares de este periódico.
El plato fuerte de la jornada fue una espectacular batukada cortesía del colectivo Valkirya y los dimonis Fang i Foc entre los que que los clowns se mezclaron y burlaron de estas criaturas tenebrosas.
María José Suárez es la responsable de recursos y eventos de la Sonrisa Médica. Suárez explicó que «siempre celebramos la Festa de Nassos el fin de semana posterior al 4 de octubre, Día Internacional de la Sonrisa. Queremos sensibilizar a todo el mundo que, afortunadamente, no ha vivido el ambiente de hospital de cerca o no nos conoce» y añadió que «todas las actividades son gratis. Nuestros voluntarios gestionan el bar y una rifa para recaudar fondos».
La Festa dels Nassos se llevó a cabo entre las diez de la mañana y las seis de la tarde y a ella acudieron el delegado del gobierno, Alfonso Rodríguez, la consellera de Salut de Govern, Manuela García y el alcalde de Calvià Juan Antonio Amengual.