Científicos de la Universidad china de Anhui han descubierto que las ranas hembra se comunican y flirtean con los machos guiñando el ojo, un comportamiento social que hasta ahora se consideraba exclusivo de algunos primates, y en especial de los humanos.
El hallazgo se publicó en el último número de la revista especializada Current Biology, donde los investigadores explican que emplearon ranas de la especie Odorrana tormota, cuyo hábitat son los torrentes y ríos de gran caudal y que se comunican principalmente mediante ultrasonidos.
Sin embargo, la investigación mostró que las hembras de estas ranas también usan los guiños de ojo para «animar» a los machos a iniciar el ritual de apareamiento, lo que indica que el movimiento de párpados en animales no primates también puede tener fines sociales y no solo fisiológicos.
Hasta ahora, se consideraba que el guiño en especies no primates solo servía para lubricar la córnea y limpiar los ojos de partículas extrañas como polvo.
Los científicos llevaron a cabo el estudio mediante observaciones de campo y experimentos controlados de apareamiento, un proceso en el que comprobaron que solo los machos que habían recibido un guiño de la hembra lograban aparearse con éxito y no eran rechazados.
Según el líder de la investigación, Zhang Fang, citado por la agencia oficial Xinhua, el hallazgo supone un avance importante en el campo del comportamiento social y comunicativo de las ranas, y por ende en el conocimiento del origen y la evolución de la comunicación visual entre animales.