Pasear entre las jaulas de Son Reus nunca es agradable. Los ladridos de sus inquilinos se clavan en la mente como puñales. Aunque, por suerte, hay quién lucha por darles una segunda oportunidad. La Asociación Peluditos de Son Reus ha organizado este sábado su 14 desfile para fomentar la adopción de los canes que habitan la Perrera Municipal de Palma. Los primeros asistentes llegaron a la perrera a las 9.30 y, hasta las 12.30 horas, vieron desfilar a más de una treintena de perros, la mayoría de raza potencialmente peligrosa. Algunos han pasado más de dos años entre rejas.
Bajo el mando de sus cuidadores, que ya les habían dado un paseo previo para bajar las revoluciones caninas, los perros se exhibieron frente al público, que pudo interactuar con ellos. El papel de los voluntarios es clave para lograr una adopción fructífera. Dado que los pasean varias veces a la semana, conocen los canes en profundidad. A medida que se desarrollaba el desfile, brindaban información de interés de cada perro, -unos requieren mucha actividad física, otros no pueden convivir con niños, aves u otros perros; unos están enfermos, y otros requieren licencias específicas para su tenencia-. Conocer la historia y las particularidades de cada animal facilita el proceso de adaptación y evita posibles renuncias. Todos merecen una otra oportunidad.
Aunque no pudieron salir a desfilar, los voluntarios les recordaron al público presente que en la perrera también hay catorce gatos esperando un nuevo hogar. Este desfile contó con la presencia del alcalde de Palma, Jaime Martínez, así como del regidor de Bienestar Animal, Llorenç Bauçà, quienes visitaron las instalaciones de la perrera y vieron parte del desfile.