La gran mayoría de niños sueñan en convertirse en policías cuando sean grandes. Sus particulares héroes de capa azul no quisieron fallar a su cita anual y compartir con los más peños unos momentos inolvidables para ellos. No iban en trineos empujados por renos desde el Polo Norte, pero lo hicieron a bordo de coches patrulla, con sirenas y uniformados.
Una representación de agentes de las policías locales de Inca y sa Pobla mostraron su lado más solidario entregando regalos a los niños enfermos ingresados en el hospital de Inca. Este emotivo acto se llevó a cabo el pasado vierenes con la finalidad de hacer algo más llevadera la estancia de niños enfermos en el hospital comarcal de Inca.
Esta iniciativa, un año más, contó con la colaboración de la asociación ‘Policías sin Fronteras', respresentados por Javier Ramón, uno de sus directivos más destacados en la Isla. Los agentes entregaron más de decenas de regalos a los más pequeños que estaban ingresados en la Unidad de Pediatría del centro hospitalario. Está previsto que en los próximos días esta bonita iniciativa también se haga extensible a los hospitales de la comarca de Manacor y a los de la capital balear de Son Llàtzer y Son Espases.
También recibieron un presente todos aquellos menores de 16 años que se encontraban en otras áreas del hospital. «Ha sido muy emotivo. Es un gran orgullo y satisfacción poder participar con estos detalles, sacar una sonrisa, una alegría, un poco de distracción a los niños y niñas que lo necesita», apunta Toni Borrás, jefe de la Policía Local de sa Pobla.