El vestido que la infanta Sofía escogió para la jura de la Constitución de su hermana Leonor ha puesto el foco en la moda circular. La hija menor de los reyes Felipe VI y Letizia apostó por una prenda de la firma inglesa Erdem que alquiló durante cuatro días en el portal Borow, un gesto que ha llenado los titulares de los medios de comunicación y que ha convertido a la infanta en embajadora de la moda sostenible. Con este gesto ha dado visibilidad a una forma de ir a la última mientras se reduce el impacto ambiental y social.
En Mallorca hay dos empresarias que han creado su propio negocio de alquiler de prendas: Ester Seguí ofrece en PipaLook prendas para bebés de 0 a 2 años y Beatriz Tomás Escarrer se ha centrado en ropa para femenina para eventos en The Dressing Room. Ester reconoce que cuando vio que la infanta Sofía había alquilado su vestido se llevó una grata sorpresa e incluso compartió la noticia en sus redes sociales: «Está muy bien porque no lo va a volver a usar. Pero el alquiler en niños es muy difícil porque la gente asocia que lo mejor es lo nuevo». Beatriz también aplaude la actitud de la hija de los Reyes y considera que es un buen ejemplo: «Me encanta. Nadie mejor que una familia mediática como es la Familia Real para apoyar la moda circular. Es bueno para el medio ambiente y nos ayuda a no acumular prendas que no nos vamos a volver a poner».
Los diseñadores, por su parte, también están concienciados con el impacto de la moda en la naturaleza, y Pablo Erroz es un ejemplo. El mallorquín, que fue el artífice de la falda de tela de llengües que lució la reina Letizia en Valldemossa, asegura que le pareció un buen gesto: «La moda tiene que hablar de las realidades de nuestros días. Me parece un recurso interesante cuanto menos. Que lo haga la institución es un guiño que de se está modernizando». Pablo se muestra a favor de la circularidad y reconoce que lo intenta llevar a cabo en su marca: «Es un fenómeno de nuestro días que es muy necesario». Respecto a alquilar sus prendas, explica que ya se han puesto en contacto con él algunas plataformas y que «puede ser una vía a explorar».
Por su parte Pedro Mesquida, de las tiendas Xino's y Dona, se muestra crítico con la opción de alquilar ropa: «Si es ropa a precio medio es ilógico porque es asequible para nuestros bolsillos. Aplicado a la gran costura es desprestigiar un poco la marca. Desde el punto de un comerciante o consumidor de una marca no lo veo lógico». El empresario considera que «no se puede ofrecer un pantalón usado como si fuese nuevo, por muy lujo o no que sea» y se muestra más partidario de las tiendas de segunda mano. Aunque hay diversidad de opiniones sobre esta nueva forma de consumir moda, lo cierto es que tras la aparición el pasado miércoles de Sofía, las búsquedas de los términos «vestido infanta Sofía alquiler» y «Borow» aumentaron considerablemente, algo que demuestra que esta práctica ha generado un interés.