Ser padres cambia la vida. La que se llevaba hasta entonces dista mucho de la futura, repleta de responsabilidades entorno a los enteros cuidados de un bebé recién nacido. Con ese horizonte en mente, cada vez más parejas se unen a la tendencia en auge de irse de 'baby moon', el último viaje en pareja antes del nacimiento del hijo; una costumbre ya asentada en Estados Unidos y en el norte de Europa y en la que Mallorca se postula como uno de los destinos estrella.
«El concepto nace parecido al del viaje de luna de miel, o, en inglés, honey moon. Las parejas aprovechan para descansar lejos de casa y pasar momentos juntos, antes de la llegada del bebé», explica Ilonka Moljin, CEO de BabyMoon Travel, una agencia de viajes online danesa, dedicada en exclusiva a organizar estancias a parejas expectantes. Entre su cartera de destinos, destaca Mallorca, con especial éxito entre los turistas del norte de Europa. «Suelen ser parejas de entorno a 30 años o, a veces, amigas que sorprenden a la embarazada con un viaje sorpresa. Eligen destinos tranquilos, urbanos o en la naturaleza, y disfrutan su estancia haciendo tratamientos de spa o realizando actividades de bajo riesgo e impacto», añade Moljin.
El momento idóneo para irse de babymoon es en el ecuador del embarazo, un periodo de mayor tranquilidad para la mujer, con las molestias del primer trimestre ya superadas y sin aún la pesadez y cansancio propios del final de la gestación. La empresaria subraya que «estar embarazada no es sinónimo de estar enferma», por lo que, salvo advertencia médica o malestar de la gestante, es posible viajar con normalidad. Eso sí, el itinerario y las actividades se personalizan y adecuan en cada caso, dependiendo del embarazo de cada mujer. «Obviamente, es un periodo con ciertas restricciones en tema sanitario que tenemos siempre en cuenta», recalca. Ilonka pone en valor que se trata de un tipo de turismo con poder adquisitivo medio-alto (de media entre los clientes de su empresa, una noche en un hotel de Mallorca en plena temporada ronda los mil euros) y desestacionalizado, ya que las fechas dependen de las semanas de embarazo.
En países del norte se ha convertido ya en una costumbre consolidada y está empezando a penetrar cada vez más en España. En redes sociales, abundan fotografías y vídeos de parejas embarazadas de viaje, bajo el hashtag #babymoon, algo a lo que se han sumado personalidades españolas como la influencers Alexandra Pereira y María Pombo, o más recientemente Cristina Pedroche y Dabiz Muñoz.
«Fue realmente una semana maravillosa, llena de deliciosos mariscos, chapuzones en el mar, lectura junto a la piscina y mucha relajación antes de que naciera el bebé», escribió al volver de su babymoon en Mallorca la bloguera e influencer Julia Berolzheimer.
«Es muy agradable tomarse un tiempo solos los dos antes de uno de los cambios más importantes de la vida. Después de descubrir que estaba embarazada en diciembre, parece que hemos estado en una carrera loca para tener todo listo antes de que llegue el bebé. Todos los motores han estado encendidos, trabajando, aprendiendo, creciendo y planificando. Así que fue un placer tomarnos un tiempo para nosotros mismos y reducir el ritmo», señaló.