La infanta Sofía ha recibido este jueves la confirmación en una ceremonia junto a sus compañeros de clase del colegio y arropada por los reyes, la princesa Leonor, la reina Sofía y sus abuelos maternos y con Felipe VI como padrino. Al igual que hace dos años en la confirmación de la princesa de Asturias, la iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, en el distrito madrileño de Aravaca, ha sido el escenario donde la infanta, de 16 años, ha renovado su fe católica. Lo ha hecho junto a otros quince alumnos de su clase del colegio Santa María de los Rosales, donde en pocas semanas va a terminar cuarto de Educación Obligatoria Secundaria (ESO) y del que se despide para estudiar bachillerato dos años en el mismo internado de Gales (Reino Unido), donde se graduó su hermana el pasado sábado.
Antes de la misa, la Casa del Rey ha desvelado que Felipe VI era el padrino de confirmación, igual que con la princesa Leonor. Además de con sus padres y su hermana, Sofía de Borbón ha estado acompañada por la reina Sofía y los padres de la reina, Paloma Rocasolano, madrina de bautizo de la infanta, y Jesús Ortiz, así como la pareja de este, Ana Togores. Se daba por hecha la ausencia de Juan Carlos I por su alejamiento de la Familia Real tras su decisión de irse a vivir a Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos), donde reside desde agosto de 2020.
Don Felipe, doña Letizia, sus hijas y los otros familiares han llegado a la explanada exterior de la parroquia 20 minutos antes el comienzo de la misa. Antes de entrar en la iglesia, los reyes, la princesa y la infanta han posado ante los medios gráficos, y a continuación, se han sumado a la foto doña Sofía y los abuelos maternos. La princesa Leonor se ha mostrado muy cariñosa con la reina Sofía, primero al ir a buscarla para unirse a la foto de familia y, a continuación, al cogerla por la cintura para entrar juntas en la iglesia. Tras la ceremonia, que se ha prolongado durante algo más de una hora, han vuelto a protagonizar gestos de cordialidad, en especial, de la reina con su madre y su suegra, a las que ha agarrado del brazo para repetir la estampa de la llegada.
Felipe VI ha pedido a la infanta que se situara en el centro de la foto al ser la protagonista de la jornada. Sofía de Borbón, quien ha lucido un mono color fucsia, se ha mostrado sonriente ante los medios gráficos y al ser preguntada a su llegada si estaba nerviosa, se ha limitado a responder: «Bueno». Antes de marcharse, los reyes y sus hijas se han acercado a saludar a un grupo de personas que les ha vitoreado junto al recinto de la iglesia. La imagen familiar de hoy no pudo darse hace dos años en la confirmación de la heredera al trono debido a las restricciones de invitados por la pandemia. Fue en la comunión de la infanta en mayo de 2017 cuando tuvo lugar una foto similar, aunque en aquella ocasión sí estuvo el rey Juan Carlos.
Al considerarlo un acontecimiento de «índole familiar», la Casa del Rey solo ha permitido el posado familiar a la entrada y la salida de la parroquia y no ha distribuido imágenes de la ceremonia con el fin de respetar la privacidad de las otras familias. Como es tradición en el colegio, Sofía de Borbón participó en un retiró espiritual hace unos días con los compañeros de clase en un pueblo de la sierra de Madrid. La hija menor de los reyes asistió ayer, miércoles, a la ceremonia de la confirmación del primer grupo de compañeros del colegio que ha recibido este sacramento por la amistad que tiene con ellos. La misa la ha oficiado el vicario episcopal Juan Carlos Merino, acompañado por los dos capellanes el colegio.