El domingo se estrenó en la plataforma Atresplayer Premiun la serie Upa Next, que llega casi dos décadas después de la exitosa serie Un paso adelante, con una nueva generación de bailarines entre los que se encuentra Néstor Navarro (Palma 1993), como alumno de la escuela de baile de Carmen Arranz. Aunque de niño siempre quiso ser uno de aquellos bailarines, «estudié enfermería y aunque no he ejercido mucho, durante la pandemia me quedé sin trabajo y me puse a trabajar de enfermero, aunque seguiré bailando hasta que el cuerpo aguante».
¿De niño ya soñaba con dedicarse al mundo del baile?
–En mi casa veía los videoclips de la MTV donde aparecían bailarines haciendo coreografías increíbles, las galas de televisión en Nochevieja, actuaciones de artistas en concierto, etc. El primer musical al que me llevó mi madre fue Hoy no me puedo levantar, y seguía la serie Un paso adelante. No sabía en qué medida ni cómo, pero dije que yo acabaría estando ahí en algún momento.
¿Cuál es su papel en Upa Next?
–En la serie mi papel es como bailarín titular, aparezco en todos los números de baile pero también en las escenas con los actores principales como en zonas comunes en la escuela, clases, fiestas, etc. y por lo tanto tengo también interacción con ello, aunque no de texto.
Era su primer rodaje, ¿qué ha aprendido de este trabajo?
–Mucho, tanto de mis compañeros actores como del equipo de dirección, ya que nunca había trabajado en ficción y aunque no tengas texto tienes que interpretar si estas en escena, ya sea reaccionando a alguna situación en concreto, al texto de los actores, y además en un registro muy distinto al teatro.
¿Qué fue lo más complicado, los castings o el propio rodaje?
–Las dos cosas han sido terriblemente agotadoras. El proceso de cásting fue muy duro. Tuve que pasar varias pruebas de diferentes estilos, muchas horas, muchos nervios, mucha exigencia y hubo un nivel increíble. Necesité una semana para recuperarme física y mentalmente. El rodaje ha sido una montaña rusa de emociones. Ha sido la mejor experiencia que he vivido a nivel personal y profesional.
¿Qué fue lo peor durante las grabaciones de Upa Next?
–Además del agotamiento, lo peor ha sido los madrugones, levantarme a las 4 o 5 de la mañana para rodar. Pero sin duda vale la pena. Lo hemos pasado muy bien, hemos reído mucho, bailado y llorado, pero sin duda no lo cambio por nada y volvería a repetirlo mil veces.
Tras la grabaciones, ¿le ha cambiado en algo su vida?
–No lo sé, pero sí que es cierto que llegó en un momento de mi vida en el que me ayudó muchísimo ya que estaba viviendo un momento vital muy complicado y me salvó. He aprendido a valorar el presente y a exprimir la experiencia al máximo y a recordar a ese niño que de pequeño veía en su casa aquellos bailarines de Un paso adelante, y a decir que si quieres, puedes.
¿Con qué actores o actrices de la serie se lleva mejor?
–Es como preguntar si quiero más a mamá o a papá. Somos una familia, nos seguimos viendo después de la serie, incluso con la anterior generación de UPA como Miguel Ángel Muñoz, Beatriz Luengo y Mónica Cruz.
¿En algún momento quiso tirar la toalla del mundo del baile?
–Varias veces. Una de las cosas que más recibes en esta industria es un ‘no'. Hay que aprender a manejar ese momento y tener claro que nunca se trata de algo personal o que signifique que vales menos. Hay que seguir adelante.
¿Qué proyectos tiene?
–Actualmente estoy bailando en la gira de Carlos Baute, tengo varios conciertos con algunos artistas y otro proyecto del que no puedo hablar.