¡Gran fiesta en el Megapark! El jueves, el templo de la fiesta de la Isla para los turistas alemanes arrancó la temporada. Cerca del mediodía casi mil visitantes irrumpieron en la gran discoteca del Balneario 5 de la Platja de Palma, en el primer día de apertura, para disfrutar de un programa que se prolongará hasta mañana. La cantante Minnie Rock abrió el espectáculo con sus canciones, y el público, estimado entre los 18 y los 70 años, se animó en la fiesta.
En el lugar coincidieron grupos de mujeres jóvenes celebrando despedidas de soltera, hordas de jóvenes con camisetas de fútbol, pero también muchos visitantes más tranquilos, probablemente jubilados, que disfrutaban de su tiempo libre en Platja de Palma. Por supuesto, no podía faltar sangría y cerveza para celebrar.
El coste de la fiesta
Se notó que el precio del litro de cerveza ha aumentado significativamente en comparación con el año pasado y ahora cuesta exactamente 16,80 euros. El portavoz de Megapark, Carlos Lucio, señaló al respecto que «tuvimos muchos gastos durante el año pasado que todavía tenemos que compensar con este ligero aumento en los precios. Debido a la inflación, los salarios de los trabajadores contratados se han incrementado en un 5 por ciento. Nuestra factura de electricidad también es tres veces más alta que antes».
Con el precio de las bebidas, el templo de la danza también cubre las tarifas de sus artistas, porque el lema sigue siendo que los visitantes tengan entrada gratuita. Pero hay una excepción a esta regla en 2023: Un evento especial, por ejemplo, es la actuación de la rapera y youtuber Katja Krasavice, que se presentará el próximo 17 de mayo y la entrada costará 40 euros. Según señaló Lucio, Megapark también ha invertido en palcos nuevos y un sistema láser en el piso superior, «habrá un espectáculo de luces especial con el nuevo sistema tres veces al día, a las 22:30, 23:30 y 00:30».
Megapark quiere adaptarse más a la tendencia general, que avanza hacia el turismo de calidad en el futuro. «No queremos promover el turismo de bebidas en la Platja de Palma. Por supuesto que aquí también se bebe, como en Miami o en Saint Tropez», señala Lucio. Para que todo funcione de una manera más regulada, también han impuesto unas normas internas. «No habrá música que sea chabacana y primitiva, ni canciones que digan algo como ‘beber, beber, beber'. Pero, por supuesto, existe una libertad artística, por lo que no queremos dictar demasiado a los músicos qué canciones interpretan en el escenario».
Esto también incluye adherirse a un código de vestimenta, que fue muy debatido la temporada pasada. «No permitimos que entren visitantes que no estén bien vestidos o que sean ‘vulgares'. Esto incluye la prohibición del mankini, también conocido como ‘traje de borat'. Tampoco se permitirán artículos obscenos o perturbadores», destaca Lucio.