Peces con mayor talla, menor contaminación y un ecosistema más rico son algunos de los beneficios que ha reportado la protección de sa Dragonera y sus aguas. Mostrar esta riqueza y la necesidad de su preservación es el objetivo de la exposición MARE-Dragonera Foto Colab realizada con motivo del segundo aniversario de la declaración de la reserva marina de sa Dragonera en sus aguas exteriores y que ayer se inauguró en el Museu Marítim, en Ses Voltes.
MARE y el proyecto sa Dragonera Blava de Save the Med han trabajado para mostrar a través de fotografías los fondos marinos y el litoral del parque. Lo hacen desde diferentes perspectivas desde la visión de pescadores, del club de buceo o de los participantes del taller de fotografía submarina. «La preservación de la parte marina ha supuesto un antes y un después en sa Dragonera», reconocía ayer la bióloga de Save the Med, Yaiza Santana.
Prueba de ello es que las tallas de los peces en aguas superficiales –de 0 a 15 metros– «han incrementado un 140 % su tamaño, mientras que en aguas más profundas –de 20 a 25 metros– este incremento es del 340 %», ejemplificó. La exposición inaugurada ayer reflexiona sobre la importancia ecológica, social y económica de la reserva y se complementa con unas jornadas de reflexión entre hoy y el domingo.