La 'nit de Sant Joan' marca, en parte, el inicio del verano. El 23 de junio de celebra la víspera del santo, considerada la noche más mágica de los 364 días restantes del año. Para mantener vivas las tradiciones, las playas de Mallorca se llenan de gente que va a cenar a la luz de la luna y a partir de la medianoche atraer a la felicidad y el amor a través de sus curiosos rituales. Destacan las celebraciones en varios puntos de Palma, Calvià, Deià, Muro, Son Servera y Sant Joan. Además, en muchos lugares se organizan conciertos al aire libre para amenizar la velada.
En Palma, el epicentro del 'infierno' será, un año más, el Parc de la Mar. A partir de las 19 horas se realizarán talleres infantiles y animación para los más pequeños. El plato fuerte será a a las 22.30 horas con un correfoc en el que participarán siete grupos de dimonis y tres bestias de fuego, estos son: l'Associació cultural Dimonis de Son Sardina (Enfocats), l'Associació Cultural Realment Cremats, l'Associació Kimfumfa, l'Associació Cultural Encabritats,l'Associació Cultural Trabucats, l'Associació es Cau des Boc Negre y l'Associació Trapalma. Incobus. En cuando a la bestias de fuego, asistirán l'Associació de Veïnats Pla de Sant Jordi amb el Drac i Guardians de Sant Jordi; l'Òliba de la Real i es Drac de na Coca. En total se utilizarán 117 toneladas de pólvora. La fiesta acabará con un concierto de Xanguito, a partir de las 23.45 horas.
Aquellos que prefieran pasar la noche sobre la arena podrán hacerlo en la Playa de Can Pere Antoni, Ciudad Jardín, Can Pastilla, Cala Major o El Arenal. Por otra parte, Calvià es otra de las zonas más concurridos de esta noche. Además de disfrutar una agradable velada en la playa, el consistorio organiza conciertos y actividades para amenizar la noche. En la Plaza des Carregador, en Palmanova, a partir de las 20.30 horas, lo celebrarán con una fiesta a cargo de Melodía FM, actuarán Juan Campos y Txema Sánchez, Fernando Megía y Versionados.
El Cala Deià, entre las montañas de la Serra de Tramuntana, la noche de San Juan se convierte en noche de habaneras. En este pequeño pueblo mallorquín se reúnen en este bonita cala para disfrutar de un concierto de habaneras y cenar de trempó. Mientras que en el Castell d'Alarò se celebra 'La Festa de la Flama', con su típica tremponada popular y una revetla en el castillo que reúne a numerosas personas que prefieren pasar esta noche mágica en la montaña en vez de en la playa.
Para aquellos que buscan pasar una noche tranquila y alejada de la masificación, el Port des Canonge es una de las calas con más encanto de la Isla. También lo es Cala Bona, un pequeño enclave marítimo del municipio de Son Servera que se caracteriza por su tradicional puerto de pescadores y por el tranquilo y sosegado ambiente que se respira en las terrazas de sus bares y restaurantes.