«Cuando las primeras bombas comenzaron a caer sobre Ucrania, mi amigo, el presidente Zelenski se enfrentó a la agresión y se convirtió en la voz de una nación. Cuando los países aliados le preguntaron si quería una salida, respondió: 'Necesito municiones, no marcharme'. Semanas después del comienzo de esta horrible guerra, el presidente Zelenski ha cumplido su promesa de quedarse y defender Ucrania», por lo que ahora le toca al resto arremangarse.
Estas palabras las escribe de su puño y letra la actriz Katheryn Winnick, muy conocida en todo el mundo a raíz de su participación en la producción histórica de éxito Vikings encarnando a Lagertha, una de las principales protagonistas. La intérprete, canadiense de nacimiento con orígenes familiares ucranianos, recauda fondos para sufragar la resistencia a la invasión que Vladímir Putin lanzó sobre el país vecino el pasado 24 de febrero, ante el asombro y la incredulidad del mundo.
«Millones de ucranianos están desesperados. Necesitan alimentos, agua, mantas, medicinas y otros suministros básicos para sobrevivir a la agresión en curso», continua describiendo Winnick, que a través de su fundación recoge donativos para que Zelenski y los suyos sigan teniendo una oportunidad de resistir a la ofensiva rusa en su propio país. Desde el principio del conflicto, distintas personalidades ucranianas con influencia en el exterior alzan la voz sobre la situación en su país, como la jugadora de voley, Yuliya Gerasymova, una auténtica sensación en TikTok.
Explica que dado que sus antepasados son ucranianos «sabía que tenía que hacer algo. Al donar a través de la Fundación Winnick, su contribución ayudará a proporcionar las cosas que #ZelenskyNeeds (literalmente y en inglés ZelenskiNecesita) para ayudar al pueblo ucraniano hasta que esta crisis humanitaria llegue a su fin. Su apoyo es muy apreciado», recoge el espacio en internet destinado a esta recolecta.
La pregunta que se deriva es lógica. ¿Qué necesita Zelenski para defender Ucrania del ataque ruso? Más allá del suministro de balas y misiles, del que ya se encargan los gobiernos occidentales, la sociedad civil se mueve para amparar a las mujeres y niños, los más afectados por la invasión. Así la fundación de los Winnick colabora con una serie de partners internacionales reconocidos en materias de asistencia a crisis humanitarias y a la cooperación para el desarrollo, como Save the Children, Ukrainian World Congress, International Rescue Committee y CORE Response.
«A través de The Winnick Foundation y trabajando con estos socios, sus donaciones se destinarán directamente a ayudar a las personas que aún se encuentran en Ucrania y a aquellas que han huido de la violencia», dándoles cobertura y asistencia en cuanto a recursos básicos en la vecina Polonia, a donde han llegado gran parte de los millones de refugiados que esta guerra ha generado.